PROVINCIA DE ESTADOS UNIDOS

Historia de la Fundación

Las Hermanas de la Presentación de María, fundadas por la Beata Ana María Rivier en Thueyts, Francia, en 1796, llegaron por  primera  vez al Nuevo Mundo en 1853, a Marieville, P.Q., Canadá. En ese momento, muchos canadienses franceses habían comenzado a emigrar a los centros industriales de la Nueva Inglaterra. Familias enteras habían abandonado sus granjas y se habían desplazado al sur de los Estados Unidos en busca de empleo en fábricas de papel y de textil.

La Iglesia de Estados Unidos hizo un llamamiento para que se prestara asistencia a esas personas que habían abandonado todo lo que conocían en busca de una vida mejor para ellas y sus familias. En 1873, en un intento por satisfacer las necesidades espirituales y educativas de esta población, las hijas de la Mujer Apóstol cruzaron una vez más las fronteras internacionales para mostrar a Jesucristo.

La primera fundación estadounidense fue en Glens Falls, en el estado de Nueva York. Desde allí, las Hermanas abrieron un internado en Island Pond, en Vermont, en 1886. Muchas fundaciones siguieron rápidamente en New Hampshire, Maine, Massachusetts y Rhode Island. La mayoría de esas fundaciones eran escuelas parroquiales. Durante todo este tiempo, las hermanas siempre pertenecían a la provincia canadiense de Saint-Hyacinthe.

 

 

A petición de monseñor Georges-Albert Guertin, obispo de Manchester, las Hermanas se instalaron en Hudson, en New Hampshire, y en 1926, la Academia Presentación de María abrió sus puertas como internado para niñas. Aunque el internado se suprimió en 1971, en los pasillos de los PMA sigue existiendo una escuela elemental que acoge a unos 500 niños y niñas desde la guardería  hasta el octavo grado.

 

 

 

En 1938, Estados Unidos se convirtió en una provincia independiente conocida como la Provincia de Hudson. Diez años más tarde, debido al gran número de vocaciones y escuelas donde las hermanas ejercían su ministerio, se hizo evidente que la provincia de Estados Unidos era demasiado grande para una sola administración. Así, en 1948, la provincia de Hudson se ocupaba de las escuelas de New Hampshire y Rhode Island, mientras que la provincia de Biddeford se ocupaba de los establecimientos de Maine, Massachusetts y Vermont.

 

 

 

 

En 1958, la Provincia de Hudson compró varios edificios que habían sido utilizados como hospital en Manchester, New Hampshire. La administración provincial se trasladó entonces de Hudson a Manchester, NH.  Desde entonces la provincia es conocida como la provincia de Manchester. Pronto se abrió un segundo edificio para servir de enfermería a la Provincia hasta 1980, cuando se convirtió en capilla provincial y  residencia para las hermanas. Por último, en aquella época se añadió a esta propiedad una nueva estructura, más grande y más moderna, de servicios de asistencia y de enfermería debido al creciente número de hermanas mayores y enfermas.

La provincia de Biddeford fue creada en 1948 y su administración provincial estaba ubicada en la Academia Marie Joseph en Biddeford Pool, Maine. Más adelante, Marie Joseph no pudo albergar a la vez una Academia floreciente y la Administración provincial. En 1957, la finca Searles, ubicada en Methuen, Massachusetts, fue adquirida para la administración provincial. En ese momento, la provincia era conocida como la provincia de Methuen. Debido a la disminución del número de hermanas en las dos provincias, y por el bien de la misión, el 15 de agosto de 2012, las provincias de Manchester y Methuen se reunieron para formar la provincia de Estados Unidos.

Dos siglos y varios miles de kilómetros nos separan, en el tiempo y en el espacio, de la beata Ana María Rivier y del suelo sagrado que pisó, pero hoy sus hermanas de Estados Unidos siguen manteniendo vivo su carisma: vivir y proclamar a Jesucristo con toda su vida.

HOY EN DÍA…

Las Hermanas de la Presentación de María en Estados Unidos están muy activas, orientadas hacia la misión y la vida en comunidad, caminando hacia el mañana y confiando sólo en Dios. Creemos que nuestras vidas vividas en comunidad son esenciales para nuestra identidad mientras respondemos a la llamada de Dios siguiendo los pasos de nuestra fundadora, la beata María Rivier. Como dice nuestra Regla de Vida, tratamos de iluminarnos unas a otras para vivir el Evangelio, esforzándonos por dar a conocer y hacer amar a Jesucristo. Día tras día, en la santidad de nuestra vocación, nos amamos las unas a las otras y nos ayudamos a crecer en santidad. Vivimos el ” juntémonos » en lo cotidiano  de nuestras vidas: nuestro trabajo apostólico, nuestro compartir en comunidad y nuestras celebraciones. Sea cual sea nuestra edad o nuestro apostolado, nuestra esperanza deriva del hecho de que vivimos nuestra vida en Jesucristo y por Jesucristo. ¡Esto,  en sí, es un testimonio poderoso para el mundo en el que vivimos! Esto se manifiesta en nuestras interacciones y relaciones cotidianas entre nosotras, con nuestros colegas de trabajo, nuestros empleados laicos, los miembros de nuestra familia, nuestros amigos y todo el pueblo de Dios.

La Provincia de Estados Unidos cuenta con dos instituciones educativas y una Casa de oración. Otros apostolados nuestros incluyen la hospitalidad, la oración de intercesión por el mundo, la capellanía en las residencias de ancianos, la dirección espiritual, la enseñanza en las escuelas diocesanas y la ayuda a los pobres. En los Estados Unidos, ejercemos nuestro apostolado y vivimos en las siguientes regiones: Maine, Massachusetts, New Hampshire y Rhode Island.

Tratamos de trabajar en colaboración con los laicos en la Iglesia. ¡Esperamos transmitir nuestro carisma y nuestra misión como hermanas de la Presentación de María, compartir el espíritu de María Rivier y ser una presencia viva en la Iglesia! Deseamos transmitir a los demás su confianza inquebrantable en la providencia divina y su audacia extraordinaria. No podemos guardar esto para nosotras, debemos transmitirlo. María Rivier nos invita hoy a hacer lo que hizo en su tiempo: animadas y sostenidas por nuestra devoción mariana, ¡damos a conocer y hacemos amar a Jesucristo con toda nuestra vida! También en Estados Unidos existe un grupo de personas comprometidas que pertenecen a Laicos Consagrados de la Presentación de María, así como un gran número de Asociados de María Rivier.

EDUCACIÓN

Universidad Rivier

La Universidad Rivier es una institución católica con un programa de cuatro años que acoge a estudiantes de todos los ámbitos y les ofrece una experiencia educativa transformadora y favorable.

Situada en Nashua, New Hampshire, la Universidad Rivier fue fundada en 1933 por Sor Magdalena de Jesús, una hermana de la Presentación de María. A lo largo de su historia, la Universidad se ha dedicado a ofrecer un entorno de aprendizaje que eduque íntegramente a toda la persona – mente, cuerpo y alma. Los graduados de la Universidad Rivier sobresalen en el plano profesional, académico y en el servicio a sus comunidades.

La Universidad Rivier ofrece programas universitarios de primer ciclo, de estudios profesionales, de estudios superiores y de doctorado. Cualquiera que sea el nivel de estudios, la experiencia académica es atractiva, práctica y presencial con el cuerpo docente. Los estudiantes pueden elegir cursos en línea e híbridos además de los tradicionales en un campus de 68 acres.

 

PRONUNCIAMIENTO DE MISIÓN:

Comprometida en la herencia de la fe, la tradición intelectual y las enseñanzas sociales de la Iglesia católica romana, la Universidad educa a la persona integramente en el contexto de una comunidad académica que cultiva el pensamiento crítico, el buen juicio y el respeto a todas las personas. Esta comunidad apoya el crecimiento intelectual de todos sus miembros y les ofrece oportunidades de desarrollo social, cultural, moral y espiritual. El desafío de la comunidad universitaria es buscar la verdad a través del diálogo entre la fe y la razón.

Rivier crea un entorno en el que el aprendizaje integrado es responsabilidad compartida de los estudiantes, del profesorado, del personal y del organo directivo  y se aplica en todos los programas de estudio y en los programas extraescolares de la Universidad. Participar en la vida de la Universidad Rivier es aspirar a la excelencia académica, asumir la responsabilidad de uno mismo y de los demás, y comprometerse en un diálogo sobre las cuestiones humanas fundamentales a las que se enfrenta la sociedad, en particular la suerte de los pobres y de los desposeídos. La Universidad invita a todos sus miembros, así como al conjunto de la comunidad, a participar en la investigación intelectual y en el diálogo.

Bienvenida !

La vida de los estudiantes…

Nuevas infraestructuras de la Universidad de Rívier

La Academia Presentación de María

La Academia de la Presentación de María es una escuela privada católica mixta fundada y perteneciente a las Hermanas de la Presentación de María. Los orígenes de la Academia se remontan a 1926, año en que se crearon una escuela primaria y un internado para niñas en Hudson, New Hampshire. Las hermanas compraron el terreno actual de 90 acres para construir una escuela primaria y secundaria en el sur de New Hampshire. Después de varios años de crecimiento, estas educadoras pioneras ampliaron su misión y fundaron la Universidad Rivier al otro lado del río, en Nashua, NH. En 1990 se cerró la escuela secundaria para satisfacer las necesidades de espacio de una escuela primaria creciente.

En 2009, la Academia Presentación de María amplió su sistema educativo para incluir programas para niños de tres y cuatro años. En 2011, la academia construyó un campo de atletismo superior a todos los de la región. El Thompson Center for Athletics and Performing Arts se terminó en 2018. Hoy, la Academia Presentación de María continúa su tradición de crecimiento y excelencia educativa. En la actualidad hay más de 500 alumnos matriculados en la escuela, que siguen creciendo gracias a la dedicación de un cuerpo docente y un personal excepcional y a la colaboración con los padres, los antiguos alumnos y los bienhechores.

 

PRONUNCIAMIENTO DE MISIÓN:

La Academia Presentación de María, una escuela privada católica, reconoce que cada alumno es un hijo de Dios. Nos comprometemos a ayudar a todos los niños a desarrollarse académica, espiritual, social y emocionalmente fomentando sus dones y talentos personales. Siguiendo las huellas de Ana  María Rivier, fundadora de las Hermanas de la Presentación de María, preparamos a nuestros alumnos para convertirse en líderes católicos, individuos éticos y personas que siempre quieren aprender a lo largo de su vida.

Apostolado : Centro espiritual

Centro Espiritual Marie Joseph

Niché ubicado a lo largo de la costa sur de Maine, el centro espiritual Marie Joseph, propiedad y gestionado por las Hermanas de la Presentación de María, ofrece un refugio espiritual a muchas personas. Para un renovar la mente, el alma y el cuerpo, está disponible para las personas que buscan un espacio sagrado, silencio, sanación y una relación más profunda con su Dios. La inspiración y el celo del Centro tienen sus raíces en el espíritu de la fundadora de la Congregación, la beata María Rivier, cuyo deseo era “dar a conocer y hacer amar a Jesucristo en todas partes”.

El Centro acoge a personas de todas las tradiciones religiosas que aprecian el tiempo de reflexión en la presencia pacífica de una comunidad de oración. Los huéspedes son invitados a la oración de la mañana y de la tarde, así como a la Eucaristía diaria cuando un sacerdote está disponible. Una vez a la semana hay adoración del Santísimo Sacramento. Dos comedores permiten elegir entre una comida silenciosa y una comida donde la conversación es compartida. Además de acoger a los jubilados, el personal del centro diseña y anima programas que favorecen los temas de crecimiento espiritual, de curación y de apoyo.

La Congregación de la Presentación de María ofrece una presencia tranquila y apacible desde 1948, cuando se desarrolló un internado de mujeres jóvenes en este lugar junto al mar. Su transformación en centro espiritual tuvo lugar en 1978. El edificio data de finales de 1800, cuando el Ocean View Hotel se estableció en Biddeford Pool. Aunque ya no se trata de un lugar de vacaciones, el Centro Espiritual Marie Joseph perpetúa una tradición de hospitalidad en el marco de un acompañamiento espiritual.

Capellanía de una residencia de personas mayores

 

 

Una de nuestras hermanas ejerce su ministerio en el centro de rehabilitación y enfermería Santa Teresa, un centro autorizado para las personas que necesitan cuidados de enfermería cualificados. En este centro de salud, sus responsabilidades incluyen la actualización de los historiales médicos, las tareas de secretariado y el compartir su fe en el marco de los servicios de capellanía.

Acompañamiento espiritual

 

 

 

Algunas de nuestras hermanas son acompañantes espirituales. El apostolado del acompañamiento espiritual ha desempeñado un papel importante en la historia de la Iglesia. Cuando la gente comienza a buscar a Dios, a desear una relación mayor  con Dios o a luchar para tomar decisiones y optar por opciones  de acuerdo con la voluntad de Dios, a menudo recurren a alguien con quien puedan hablar de su camino espiritual. El acompañamiento espiritual brinda a la gente la oportunidad de tener una conversación con alguien que les escuche profunda e incondicionalmente, de una manera que les ayude a entenderse realmente y a escuchar a Dios presente y activo en sus vidas. «El acompañante» del acompañamiento espiritual es el Espíritu Santo.

Oración de intercesión

 

 La adoración y la oración son extremadamente importantes en la vida de nuestras hermanas. Nuestras hermanas mayores, en particular, ofrecen a Dios su día orando por las necesidades del mundo. Rezan la Liturgia de las Horas y el Rosario, participan en la Eucaristía, hacen la meditación diaria de la Palabra de Dios y la adoración eucarística por las intenciones de nuestro Santo Padre el Papa, de nuestra Congregación y de la Iglesia. Muchas personas confían sus preocupaciones y las de las personas cercanas a ellas, a las hermanas que las ponen con alegría ante el Señor.

 

La pastoral vocacional

La pastoral vocacional sigue siendo una prioridad para las hermanas de la provincia de Estados Unidos. Al llevar vidas auténticas, fieles a los preceptos de la Iglesia, con un compromiso visible con nuestros votos, esperamos inspirar a otras mujeres a mirar a lo más profundo de sí mismas, para escuchar la voz de Dios. No es ningún secreto que la vida religiosa en los Estados Unidos está cambiando y que está surgiendo algo nuevo. Reconocemos que actualmente nos encontramos en una encrucijada y acogemos una nueva era para la vida religiosa. Como María, confiamos profundamente en nuestro Dios mientras nos esforzamos por vivir nuestras vidas consagradas con gratitud, entusiasmo y alegría. 

 

Estamos convencidas de que Dios sigue llamando a  mujeres a una vida de servicio como hermanas de la Presentación de María aquí en Estados Unidos y en todo el mundo. Al creer esto,  todas estamos animadas a sostener las vocaciones. Para muchas de nosotras, esto significa la fuerza de nuestra oración, para otras significa atreverse a invitar mujeres que contemplen una vida de servicio en la Iglesia, y para algunas significa caminar de cerca con otra para ayudarla a descubrir lo que Dios quiere.

Para apoyar mejor a las mujeres en su discernimiento, nuestra provincia patrocina Ave Maria House, una casa para las mujeres que buscan conocer mejor la voluntad de Dios para sus vidas. Las mujeres que viven en Ave Maria House tienen la posibilidad de discernir su vocación en comunidad mientras viven con las hermanas. Las hermanas que viven en esta casa tratan de ofrecer a las mujeres un ambiente propicio a la escucha de la voz de Dios, orando por ellas y apoyándolas en el proceso de discernimiento.

Qué bien me sé los pensamientos que pienso sobre vosotros- oráculo de Yahvéh- pensamientos de paz y no de desgracia, de daros un porvenir de esperanza.  – Jeremías 29,11 –

ASOCIADOS MARIA RIVIER Y LAICOS CONSAGRADOS

 

 

Asociados Maria Rivier

La Asociación María Rivier ofrece a las mujeres y a los hombres la ocasión de compartir la espiritualidad y la misión de las Hermanas de la Presentación de María, según el espíritu de su fundadora, la beata María Rivier. Ella lanza a sus miembros el desafío de vivir su vocación cristiana a la santidad y su misión de evangelización en la Iglesia, permaneciendo en su estado de vida.

 

 

 

 

Laicos consagrados

Las mujeres y los hombres consagrados en la Presentación de María, entregan su vida a Dios mediante el celibato, la oración, la comunidad y el servicio. En 2003, dos mujeres vinieron a buscar el “¡Más”! Todo lo que tenían que traer eran los “panecillos y peces” de sus vidas. ¡Dios los ha aceptado, los ha bendecido y los ha multiplicado! Hoy, doce miembros son consagrados y otros están en camino hacia la consagración! Participan en encuentros impregnados de oración, de Sagrada Escritura, de adoración, de Eucaristía y de fraternidad.

 

 

 

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